Historia del piano:
Desde la antigüedad hasta el piano de Cristófori
Para conocer el
origen del instrumento que nos ocupa debemos
remontarnos a la consideración de algunos otros instrumentos
musicales más antiguos de
los cuales el piano
es, de alguna manera, una evolución.
En esta historia del piano,
sub rama de la historia de la música,
podemos decir que el más antiguo instrumento musical que inicia la línea evolutiva que
culmina en lo que hoy conocemos como piano es la Cítara. Este
instrumento es originario
de África y del sudeste de Asia y se remonta a la Edad de Bronce
(alrededor del año 3000
a.C.). Consistía en un conjunto de cuerdas dispuestas a cierta
altura sobre una pequeña
tabla, que eran puestas a vibrar mediante las uñas de los dedos o
algún otro elemento
punzante.
Una típica cítara
Utilicemos un poco
nuestra imaginación y tratemos de pensar en un
instrumento musical que sea como una gran cítara,
con una gran cantidad de cuerdas que,
en lugar de ser puestas a vibrar por las uñas de los dedos o por
algún elemento
punzante, son puestas a vibrar mediante la percusión de un pequeño
martillo sobre las
mismas. El instrumento imaginado será un piano.
Un instrumento
posterior a la cítara, aunque con ligeras variaciones,
fue el Monocordio. Su construcción se basaba en la colocación de una
sola cuerda (de
allí su nombre: Mono=una Cordio=cuerda) considerablemente más larga
que las de la
cítara, vibrando sobre una pequeña caja de resonancia construida de
madera. Sobre este
instrumento fue que Pitágoras, el famoso filósofo griego, realizó
sus estudios sobre
las relaciones entre los intervalos musicales, entre otros.
El siguiente paso
evolutivo lo constituyó el Salterio, un instrumento
construido sobre los principios de la cítara pero con una forma
trapezoidal en función
de las distintas longitudes de sus cuerdas. Poseía una rudimentaria tabla armónica y
pequeños puentes tonales. La forma trapezoidal del salterio es la
que más tarde se hace
presente en el diseño de los primeros harpiscordios. Una variación
del salterio la
encontramos en el Dulcimer
que, siguiendo
básicamente los mismos principios de construcción que el salterio,
estaba pensado para
que sus cuerdas no sean tocadas con las manos o con algún elemento
punzante sino para que
sean percutidas.
El piano tal cual lo
conocemos hoy en día se basa, entonces, en los
principios de construcción de los
instrumentos mencionados, cuyas cuerdas no son ya
tocadas con las manos sino percutidas por martillos.
Hay una serie de
elementos constitutivos de todos ellos que, si bien
han ido variando de forma, tamaño y material de construcción, se
hallan presentes en el
piano. Estos elementos se pueden resumir en los siguientes: un
bastidor, esqueleto o
estructura, un variado número de cuerdas tensadas a través de él que
vibran a una
determinada altura de una tabla o caja que se ocupa de amplificar su
sonido. En los
instrumentos más antiguos, salvo en el dulcimer, estas cuerdas,
afinadas convenientemente
y de muy distintas maneras a lo largo de la historia y de las
regiones geográficas, son
tocadas con los dedos.
La idea de interponer
algún tipo de aparato mecánico entre las
cuerdas y los dedos, de tal modo que aquellas no tengan ya que
tocarse directamente con
los dedos, no es tan antigua y conforma uno de los últimos pasos en
la evolución del
piano. Se supone que los primeros intentos en este sentido tuvieron
lugar alrededor de los
siglos XII y XIII.
Entre estos
instrumentos encontramos al Clavicordio, un instrumento en
el cual las cuerdas eran puestas a vibrar mediante un pequeño clavo o
aguja metálico.
Este clavo o aguja era puesto en movimiento desde un teclado
accionado por los dedos. Este
teclado, mediante sistemas más o menos complejos de piezas de madera
o metal, resortes y
paños, transmitía su movimiento al clavo o aguja. Este último
"enganchaba" la
cuerda y la liberaba inmediatamente poniéndola a vibrar.
Un desarrollo
posterior aunque contemporáneo al Clavicordio produjo un
instrumento llamado Harpiscordio. La diferencia que encontramos
entre ambos es que en este
último las cuerdas eran puestas a vibrar mediante un plectro o con
la nervadura de plumas
de aves.
Alrededor del año
1695 un italiano ll Bartolomeo Cristófori mado comenzó a construir un instrumento que, aunque básicamente era de
una especie similar al
Clavicordio y al Harpiscordio, incluía en el diseño de su mecanismo
un concepto
revolucionario. Puesto que tanto el Clavicordio como el Harpiscordio
ponían a vibrar las
cuerdas mediante algún tipo de púa o plectro, las cuerdas comenzaban
a vibrar siempre
con el mismo volumen y tono independientemente de cuan rápida o
lentamente se presionaran
las teclas. En el instrumento desarrollado por Cristofori el
elemento que ponía las
cuerdas a vibrar era una pieza de madera con la forma de un martillo
cuya punta estaba
recubierta de cuero. Esto no producía un sonido
metálico y estridente como en el
Clavicordio y el Harpiscordio sino un sonido mucho más dulce y
sostenido. Además, el
mencionado martillo tenía un sistema de escape mediante el cual era
posible variar tanto
el volumen como así también el tono del sonido. En este instrumento
estaba notablemente
aumentada la capacidad expresiva musical ya que en él no era
solamente posible producir
un determinado sonido siempre al mismo volumen y tono, como se
mencionó acerca de los dos
instrumentos que anteceden al piano, sino que también era posible
producir sonidos con
más o menos volumen que otros y producir una muy ligera variación
tonal. Y todo esto,
claro está, era posible hacerlo desde el teclado, según como éste se
tocara.
Movimientos rápidos y bruscos de la tecla producían sonidos de gran
volumen y
brillantes; movimientos lentos y apaciguados producían sonidos de
menor volumen y más
dulces en cuanto al tono.
Este fue entonces el
primer piano que se construyó. El señor
Bartolomeo Cristofori lo llamó "Forte-Piano", nombre que no
significaba nada
más que hacer referencia a lo que acabamos de decir como sus
principales
características: que el instrumento podía producir sonidos fuertes
(forte) y suaves
(piano). Hoy en día utilizamos más comúnmente la palabra Piano para
referirnos a este
instrumento.
Bartolomeo Cristofori
construyó
alrededor de veinte pianos en toda su vida, aunque se conservan
solamente
tres de ellos el más
antiguo de los cuales se encuentra en el Museo Metropolitano de Arte de New York (Nueva York)
y data de 1720.
Desde los primeros
pianos del italiano hasta los pianos actuales muchas
mejoras y avances se han hecho, pero el concepto y la idea
fundamental para su
construcción continúan siendo las mismas. Se han optimizado
materiales para lograr una
mejor calidad de sonido, se ha aumentado paulatinamente el número de
notas para ampliar
la capacidad musical del instrumento y se ha mejorado el diseño para
lograr una mejor
perfomance. Pero el concepto fundamental de Forte-Piano como un
instrumento capaz de
lograr sonidos fuertes y suaves permanece siendo el mismo.
Como
recientemente
mencionamos, el piano de Cristofori fue el primero en poseer un
sistema de mecanismo de piano con
martillo que podía lograr tanto sonidos fuertes como suaves. En 1711
Scipione Maffei
describe uno de los primeros pianos de Cristofori como un
"harpiscordio
(gravicémbalo) con fuerte y suave".
Hacia 1726 Cristofori
introduce un nuevo elemento en sus pianos, el
sistema "una corda" que permanece hasta nuestros días. Se basaba en
la
posibilidad de permitir al ejecutante mediante un comando especial
desplazar el mecanismo
de tal modo que cada martillo golpee sobre una menor cantidad de cuerdas
de lo que
habitualmente hace para lograr un sonido muy suave. En los pianos
modernos actuales el
"una corda" permite que el martillo del piano golpee sobre solo una
cuerda de
cada grupo.
Las primeras
composiciones específicas para pianos hacen su aparición
en 1732. Son las famosas 12 sonatas para piano de Giustini.
Juan Sebastián Bach
toma contacto por primera vez con un piano hacia
el año 1750. El piano estaba construido por Gottfried Silbermann
quien construía pianos
desde 1725.
Este señor era un
constructor de órganos de la ciudad de Freiberg, en
Saxonia. Tomó contacto con el piano de Cristofori hacia finales de
la década del 20 lo
que lo movió a construir los suyos propios. Bach se puso en contacto
con él y le pidió
que alivianara el mecanismo y que reforzara el volumen del sonido en
las octavas
superiores. Silbermann concretó el pedido lo que produjo que Bach se
convirtiera en
Agente de ventas de estos pianos.
Desde el taller de
Gottfried Silbermann se desarrollaron las famosas
escuelas de construcción de pianos conocidas como la "Escuela
alemana" y la
"Escuela inglesa".
Dos discípulos de
Silbermann llamados Johannes Zumpe y Americus
Backers emigraron a Londres donde desarrollaron un piano que poseía
el mismo mecanismo
que el de Cristofori aunque con notables modificaciones. Este
mecanismo evolucionado fue
el más tarde se llamó "Mecanismo inglés".
Otro discípulo de
Silbermann llamado Stein, tal vez el más notable de
ellos, realizó otras variantes al mecanismo original de un diseñador
llamado Schroter.
Este mecanismo fue el que más tarde se conoció como "Mecanismo
alemán o
Vienes".
Entre los años 1760 a
1830 hubo una gran expansión en la
construcción de pianos. En 1762 se produce el primer concierto de piano en toda la
historia realizado por Henry Walsh en Dublin. El piano cuadrado, una
variante especial del
piano de cola, hace su debut en 1776 por construcción de Sebastián Erard.
En 1773 se publican
las famosa sonatas para piano Opus 2 de Muzio
Clementi que intentan utilizar al máximo los recursos del piano. En
1775 se construye el
primer piano en los Estados Unidos de América en una fábrica
instalada en Filadelfia.
En 1795 se desarrolla
en Londres en primer piano vertical. Su
diseñador era William Stodart.
En 1808 Sebastián
Erard, un diseñador de pianos Francés de origen
alemán, patenta su famoso mecanismo de simple repetición y presenta
el agrafe que
permitía permanecer a las cuerdas en su exacto lugar luego del golpe
de martillo. En 1810
Sebastián diseña el mecanismo de pedales tal como llega hasta
nuestros días. En 1822
introduce su mecanismo de doble repetición que permitía una gran
velocidad de
repetición entre sus teclas.
En el año 1828 Ignaz Bösendorfer
funda su fábrica en Austria. Estos
pianos se encuentran actualmente entre los más destacados del mundo.
El año 1853 marca
un hito en lo que se refiere a formación de fábricas de pianos que
hoy son de renombre.
El alemán Heinrich Steinweg emigra a los Estados Unidos de América y
funda Steinway and Sons en New York. Julius Blüthner
funda su fábrica en Leipzig y Carl Bechstein hace lo
suyo en Berlín.
En 1863 Steinway
diseña y construye el piano vertical moderno con
cuerdas cruzadas y una sola tabla armónica. En 1874 perfecciona el
pedal Sostenuto. En
ese mismo año J. Blüthner patenta su famoso sistema aliquot que
incrementa la resonancia
de las cuerdas al introducir una cuarta cuerda adicional a cada
grupo de tres, aunque más
elevada. Esta cuerda no es percutida por el martillo sino que vibra
en simpatía.
En 1880 Steinway abre
una sucursal en Hamburgo comenzando a pelear el
mercado europeo con sus dos fuertes contrincantes: Bechstein y
Blüthner.
A partir de ese año
ya se puede hablar de piano moderno, tal como lo
conocemos hoy en día. Si bien encontramos desarrollos posteriores de
diseño, estos no
han sido revolucionarios.
El
Piano moderno
Características,
propiedades y modelos
Cuando
hablamos del piano moderno nos referimos fundamentalmente a los
pianos diseñados y construidos desde la última década del siglo
pasado hasta el
presente. Si bien este período de tiempo es muy amplio, los pianos
que se construyeron en
él pueden considerarse en conjunto puesto que las variaciones de
diseño y materiales han
sido menores.
Dentro de los
pianos modernos encontramos dos grandes grupos:
Pianos
verticales
Pianos de Cola
Pianos de Cola
Los pianos
verticales se caracterizan por poseer el arpa,
las cuerdas y
los martillos perpendiculares al piso. Como resultado de esto nos
encontramos con un piano
en el cual su apariencia exterior es la de un mueble "parado".
Los pianos de
cola se caracterizan por poseer el arpa, las cuerdas y
los martillos paralelos al piso. En este caso el tipo de mueble
resultante esta
"acostado" y el mueble en su parte posterior tiene forma de cola.
Dentro de los
pianos verticales nos encontramos con muebles de
distintos tamaños. De aquí que pueda hablarse de distintos modelos
genéricos de Pianos
verticales.
Estos se
pueden resumir en los siguientes cuatro grupos:
Vertical
grande o antiguo (mal llamado "de concierto"), de
más de 140 cm de altura.
Vertical de estudio. De 110 a 139 cm de altura.
Vertical Consola. De 98 a 109 cm de altura.
Vertical Espineta. Menores de 98 cm de altura.
Vertical de estudio. De 110 a 139 cm de altura.
Vertical Consola. De 98 a 109 cm de altura.
Vertical Espineta. Menores de 98 cm de altura.
Independientemente
del tamaño también podemos clasificar a los pianos
según la altura relativa del mecanismo con respecto al teclado. Así
en los Verticales
grandes encontramos mecanismos posicionados por encima de la altura teclado del y
con
alturas que van desde los 26 hasta los 40 cm. En los verticales de
estudio, también con
mecanismos posicionados por encima de la altura del teclado,
encontramos mecanismos que
van desde los 18 a los 25 cm de altura. En los Verticales Consola
habitualmente
encontramos mecanismos compactos posicionados sobre la altura del
teclado. Por último, en
los Verticales Espinetas el mecanismo se halla por debajo de la
altura del teclado.
También
pueden encontrarse, especialmente en las medidas de Pianos
Verticales Grandes o de Estudio, un tipo de piano muy antiguo
llamado "a
bayoneta". Este tipo de piano se caracteriza por poseer los
apagadores situados por
encima de la altura de los martillos y comandados por una serie de
alambres al modo de
bayonetas.
En cuanto a
los pianos de cola también encontramos entre ellos
distintos tamaños, con lo cual también se los puede agrupar en
grupos genéricos que en
este caso son cinco, a saber:
de Cola
Mignón. Hasta 130 cm de largo.
de ¼ Cola. De 131 hasta 189 cm de largo.
de ½ Cola. De 190 hasta 225 cm de largo.
de ¾ Cola. De 226 hasta 255 cm de largo.
de Gran Cola. Superiores a 256 cm de largo.
de ¼ Cola. De 131 hasta 189 cm de largo.
de ½ Cola. De 190 hasta 225 cm de largo.
de ¾ Cola. De 226 hasta 255 cm de largo.
de Gran Cola. Superiores a 256 cm de largo.
Otra
clasificación que habitualmente se realiza con los pianos,
independientemente que sean estos verticales o de cola, es su número
o cantidad de notas
o teclas. Entre los pianos modernos construidos dentro del período
ya especificado se
encuentran dos grandes grupos:
Pianos de 85
Notas
Pianos de 88 Notas
Pianos de 88 Notas
Generalmente
el número o cantidad de notas nos da solamente una
referencia aproximada a la edad del piano. Sin generalizar se puede
decir que la mayoría
de los pianos construidos entre fines del siglo XIX y la primera
década del siglo XX
tenían 85 notas. Luego de ese período los pianos se construyeron y
aún hoy se
construyen con 88 notas. Sin embargo, encontramos algunos
fabricantes de pianos como
Steinway & Sons, que construían pianos de 88 notas ya desde los
últimos años del
siglo XIX.
Otro grupo
importante de pianos, independientemente que sean estos
verticales o de cola, son los llamados pianos "pianolas" los cuales
mediante un
complejo sistema de fuelles de aire en el pasado o mediante un
complejo sistema
computarizado en la actualidad, son capaces de ejecutar por sí solos
una pieza musical.
En los pianos antiguos la música para reproducir en las pianolas
venía grabada en
"rollos". En la actualidad vienen grabadas en disquetes o CD-ROM.
Me encanta tu blog. El piano es uno de mis instrumentos favoritos, y las explicaciones que das aquí son muy importantes.Me encanta! :)
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